El presidente del CNA describe un panorama poco alentador para quienes esperan certeza del castigo en el caso investigado bajo el sistema inquisitivo plagado de defectos, que requerían auxilio, pero ningún órgano se preocupó por subsanarlos
La investigación por sobornos de coimas en el caso Odebrecht corre el riesgo de que las conductas señaladas prescriban antes de que se celebre un juicio o quizás hasta la audiencia preliminar. El abogado litigante y presidente del Colegio Nacional de Abogados, Juan Carlos Araúz, pone en perspectiva el futuro de dicha investigación de forma real, aunque las noticias no sean alentadoras para quienes esperaban encontrar justicia con este caso. Lo que sucede es que el tiempo empieza a correr desde el momento en que la fiscalía señala que se cometió el delito, así pues, si fue en 2009 y se trata de un delito simple de blanqueo de capitales, es muy probable que cuando se llame a audiencia preliminar, que puede ser dentro de un par de años, el delito haya prescrito. La investigación tomó más de 4 años, y ahora, la remisión del abultado expediente de 2,194 tomos al juzgado Tercero Liquidador, tomará semanas o meses para concretarse debido al trabajo administrativo de revisión y foliación de cada tomo. Si usted es de las personas que creen que pronto verán una respuesta de la justicia en este complejo caso, lo más seguro es que se decepcionará, ya que el sistema inquisitivo mixto mediante el cual se abrió el caso jamás recibió las correcciones para evitar la realidad que vivimos hoy. Entre ellas se cuenta, por ejemplo, la notificación de las partes para celebrar la audiencia preliminar. Lo más seguro es que habrá obstáculos, la pregunta que se hace nuestro invitado constantemente, es por qué nadie hizo nada para remendar los futuros obstáculos, y la culpa, asevera, es de los tres poderes del estado.