Combate a la corrupción, lavado de activos e inversiones centran visita de O’Brien a Panamá

Se creó una fuerza de tarea conjunta para reforzar la estrategia en contra del blanqueo de capitales y se ampliaron las actividades económicas que contempla el acuerdo mutuo "América Crece"



El combate al blanqueo de capitales ha sido un talón de Aquiles para el Istmo ante los ojos de la comunidad internacional que mira al país con deficiencias estratégicas en la materia.


Panamá recibió este lunes una visita relámpago de tres horas del embajador Robert O’Brien, asesor de Seguridad Nacional de la administración Donald Trump, quien cargaba bajo el brazo una agenda puntual.

Los estadounidenses están interesados en impulsar varios temas con Panamá, entre ellos uno importante es reforzar una alianza crucial que será fundamental para proteger al sistema bancario panameño del lavado de dinero de Nicolás Maduro, presidente de Venezuela acusado por Trump de ser el líder del cartel de los soles y de participar en una conspiración narcoterrorista en contra de su país.

Para ello, la casa blanca promueve una nueva política en la región que se resume en el “Marco Estratégico del Hemisferio Occidental”, a través del cual contempla reforzar los lazos con sus aliados en intercambio de información de inteligencia, capacitación policial y de aduana. Con Panamá, por ejemplo, se anunció la creación de una fuerza de tarea conjunta para combatir la corrupción y el lavado de activos. Tópico que se abordó durante la reunión privada que sostuvo el diplomático con el mandatario panameño Laurentino Cortizo en el Palacio de las Garzas.

El enviado de Trump vino acompañado por el Almirante Craig Faller, comandante del Comando Sur de las Fuerzas Armadas de EE.UU.; Mauricio Claver-Carone, director del Consejo de Seguridad Nacional para el Hemisferio Occidental; y Adam Boehler, director general de la Corporación Financiera de Desarrollo Internacional de los EE.UU.

La fuerza de tarea consiste en la capacitación y consultoría de personal del Buró Federal de Investigaciones (FBI) a fiscales, agentes de estamentos de seguridad y agencias regulatorias de Panamá. Se enfocará en desmantelar redes de lavado de dinero y reforzar las capacidades para investigar y llevar a juicio los casos de corrupción y lavado de dinero.


El enviado de Trump vino acompañado por el Almirante Craig Faller, comandante del Comando Sur de las Fuerzas Armadas de EE.UU.; Mauricio Claver-Carone, director del Consejo de Seguridad Nacional para el Hemisferio Occidental; y Adam Boehler, director general de la Corporación Financiera de Desarrollo Internacional de los EE.UU.


El combate al blanqueo de capitales ha sido un talón de Aquiles para el Istmo ante los ojos de la comunidad internacional que mira al país con deficiencias estratégicas en la materia. Como consecuencia, y a pesar de los arduos esfuerzos para adecuar la legislación nacional a los requerimientos del Grupo de Acción Financiera Internacional (Gafi), Panamá fue incluido en 2019 en la lista gris al considerar que el progreso alcanzado no fue suficiente para elevar la calificación.

Este acuerdo permitirá el respaldo a las autoridades panameñas en la identificación de las fuentes de financiación del terrorismo y otros delitos procedentes del blanqueo de capitales. La delegación de los Estados Unidos reconoció los avances de Panamá en la lucha por salir de las listas grises a través del fortalecimiento de su plataforma financiera y reiteró su apoyo a Panamá en la lucha contra el lavado de dinero y la corrupción.

AMÉRICA CRECE
Es de interés para los países de la región contar un sólido crecimiento económico, especialmente después de la crisis de Covid-19 que en Panamá por ejemplo ha causado un déficit significativo en los ingresos del Estado, la producción nacional y un desempleo que se calcula en más del 20%.

En este contexto el programa ‘América Crece’ que impulsa Estados Unidos con varios aliados busca canalizar la inversión privada en obras de infraestructura. Pretende atraer la inversión de industrias establecidas en suelo asiático e instalarse en Panamá y otros países.

“Estados Unidos tiene un mejor futuro si Panamá goza de un buen futuro, al igual que todos los países de la región”, indicó O’Brien en una entrevista efectuada por el equipo de relaciones públicas de la embajada estadounidense en Panamá, ya que la cobertura fue de acceso restringido.

“América Crece es un programa para aprovechar el talento de nuestros vecinos y refuerza la economía de la región, no hay mejor lugar para iniciar este programa que con Panamá, un país con el que compartimos una larga historia, tenemos lazos familiares con Panamá y la relación bilateral es fantástica. Tuvimos una excelente reunión con el presidente Cortizo a quien Trump estima mucho y es una señal de que habrá un gran futuro económico para la gente de ambos países”, expresó el diplomático.

Panamá fue el primer país en firmar el memorándum de entendimiento “América Crece” en 2018, el cual estuvo enfocado en infraestructura energética. Este memorándum ampliado permitirá seguir canalizando recursos y conocimientos de todas las agencias de gobierno de los EE.UU. para impulsar la creación de plazas de trabajo y la actividad económica de todo tipo de proyectos de infraestructura en Panamá.

LUCHA ANTI PANDEMIA
“La pandemia del covid-19 nos ha afectado severamente a todos, y hemos notado una carencia de ventiladores en todos los países, por lo que fabricamos estos 250 (de los cuales se entregaron 50) ventiladores lo más rápido que pudimos y tuvimos tanto éxito en la tarea que donamos los ventiladores a varios países entre ellos Panamá”, añadió el diplomático.

Reveló que previamente el presidente Trump conversó por teléfono con su homólogo panameño, Cortizo, y le comunicó sobre la donación. “Eso es una señal de buena voluntad con nuestros vecinos, además de una donación de $4.4 millones de dólares en asistencia para apoyar la respuesta de Panamá al brote de Covid-19”, señaló el estadounidense.

Aunado a lo anterior se hizo entrega de 6,600 kits de pruebas y otros suministros necesarios para enfrentar al COVID-19. La Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID) brindó los fondos para los ventiladores y las pruebas de COVID. Por su parte, el Comando Sur del Departamento de Defensa de los Estados Unidos otorgó el equipo de protección personal.

“Hoy, en nombre del presidente Trump, me enorgullece donar estos 50 ventiladores fabricados en los Estados Unidos, así como otros recursos médicos al gobierno de Panamá, para apoyar su gestión ante el COVID-19. Estados Unidos se siente honrado de estar junto a Panamá y su pueblo, a medida que combatimos el nuevo coronavirus”, dijo el embajador O’Brien durante la visita.

Los 50 ventiladores Zoll EMV+ serán distribuidos en hospitales públicos en todo el país para reforzar los esfuerzos de las autoridades de salud panameñas para brindar atención médica a pacientes en condiciones críticas, salvar vidas y reducir el número de muertes por COVID-19 en Panamá.

La delegación estadounidense arribó a Panamá aproximadamente a las 8:50 de la mañana y partió un poco después de mediodía. A su llegada al aeropuerto Panamá Pacífico fueron recibidos por el director de protocolo y ceremonial del Estado Diomédes Carles. La primera reunión en la agenda se realizó en la Presidencia donde sostuvieron reuniones bilaterales con el mandatario Cortizo. Posteriormente se trasladaron a la Cancillería donde fueron atendidos por el canciller Alejandro Ferrer y se efectuó el acto de donación. A su llegada al aeropuerto

MARCO ESTRATÉGICO DEL HEMISFERIO OCCIDENTAL: CINCO EJES ESENCIALES
La política articula las prioridades de los Estados Unidos y una visión integral del compromiso para garantizar la democracia, la prosperidad y la seguridad en el Hemisferio oeste. De acuerdo al documento, la región se ve amenazada por los regímenes dictatoriales represivos que ponen en riesgo la seguridad regional, una situación agravada por la invasión de organizaciones criminales transnacionales y países adversarios que ejercen una influencia maligna. El documento hace referencia a Venezuela, Cuba y Nicaragua, gobiernos que deben volver pacíficamente a la democracia.

Estos actores externo, se lee en documento, “buscan alinearse con simpatizantes regímenes, para explotar los abundantes recursos de la región para su propio beneficio, y apuntar a sus inversiones y donaciones para expandir su propia influencia política y económica, todo mientras contribuyendo a la corrupción generalizada y al deterioro sistémico del estado de derecho”.

Prevenir la migración, el contrabando y la trata de personas ilegales y descontroladas a través de control y vigilancia efectivos de las fronteras y abordando los impulsores de la emigración es otro de los objetivos que intenta impulsar la política de Trump.

En segundo lugar combatir las organizaciones de crimen organizado y la producción y el tráfico de estupefacientes y precursores químicos. fortalecer los marcos legales y regulatorios para reducir el lavado de dinero, la corrupción y otras actividades ilícitas que permiten a las organizaciones criminales internacionales operar con impunidad.

El tercer eje consiste en asegurar relaciones bilaterales efectivas de aplicación de la ley con socios de ideas afines y apoyar la creación de capacidad para los funcionarios de policía y aduanas.

También busca promover las relaciones de defensa y seguridad con nuestros aliados y socios de ideas afines para emparejar las capacidades militares con los desafíos de defensa compartidos, limitar la influencia de actores, apoyar los esfuerzos de lucha contra la trata dentro de los límites legales, promover la defensa reforma y profesionalización militar, y defensa de la patria, así como mejorar el intercambio de información y fortalecer la seguridad de la infraestructura cibernética y crítica.

No hay comentarios

Publicar un comentario